Foto: F1
Max Verstappen (Red Bull) venció tras gran remontada en el Gran Premio de Bélgica, el decimocuarto del certamen de Fórmula 1, que se disputó en el circuito de Spa-Francorchamps. El neerlandés, actual campeón mundial, plasmó una gran remontada ya que largó en el puesto 14 por la penalización por el cambio del motor, obtuvo su noveno triunfo en la temporada y sigue ampliando su ventaja en la punta del campeonato.
El primer golpe de escena fue luego de la largada ya que al llegar a la chicana Fernando Alonso (Alpine) dobló por adentro y se tocó con Lewis Hamilton, cuyo Mercedes se elevó y golpeó la suspensión trasera contra el piso. Eso le generó daños al auto del inglés que abandonó en los siguiente metros. “Por afuera, qué idiota. Me cerró la puerta. Este piloto siempre haciendo estas cosas”, disparó el español. Los comisarios deportivos analizaron la maniobra y determinaron que fue un toque de carrera. En la vuelta 18 Verstappen, con neumáticos que tuvieron mejor temperatura y adherencia al asfalto que Sainz, dio cuenta del español y volvió a comandar la competencia.
El panorama favorable para Verstappen contrastó con la de su principal rival en la lucha por el título, Leclerc, quien padeció por la degradación de sus gomas. Largó con el compuesto blando, luego le pusieron medios y más tarde dialogó con el equipo sobre un posible cambio de gomas. Más tarde la competencia entró en una meseta y Verstappen controló las acciones sin problemas. Fue tal su diferencia que tras su segunda detención en los boxes en la vuelta 31 (le pusieron gomas medias para llegar al final) volvió a pista siendo primero. El último tramo fue un monólogo de Verstappen quien se encaminó a su noveno triunfo en la temporada. Su labor fue aplastante ya que antes de cumplir diez giros ya se puso tercero.
En el primer cuarto de la carrera ya peleó por la punta y concreta una victoria contundente, que además fue la de la mayor remontada y superó a la de Hungría (la última carrera) en la que largó décimo.