Foto: F1 Twitter
Verstappen 25-Leclerc 0: la operación contable en puntos en el Gran Premio de Francia fue perfecta para el líder del Mundial de pilotos de la Fórmula 1, Max Verstappen (Red Bull), con su triunfo en Le Castellet, donde Charles Leclerc (Ferrari) abandonó tras un accidente.
Como en 2021, Verstappen quedó en el circuito Paul Ricard por delante del inglés Lewis Hamilton (Mercedes), segundo. Tercero fue el otro Mercedes, el del también británico George Russell.
Leclerc fue el gran perdedor de la jornada en el sur de Francia. Antes de la duodécima de las 22 citas del Mundial, el monegasco, que había ganado la anterior carrera en Austria, tenía 38 puntos de desventaja respecto a Verstappen. Ahora se ve descolgado a 63 puntos del neerlandés.
La sucesión de acontecimientos fue muy dolorosa para Leclerc, que había salido de la ‘pole’ y lideraba la carrera cuando se salió de pista en la vuelta 18, terminando a baja velocidad contra los neumáticos de la barrera de seguridad. Perdió el control, hizo un trompo y su carrera terminó.
Sus gritos de frustración tras la salida de pista tranquilizaron pronto sobre su estado de salud. La desilusión, eso sí, era evidente, tanto para él como para un número importante de seguidores, en un circuito cercano al Principado.
Con gesto serio, señaló en la comunicación por radio un error de pilotaje para explicar su salida de pista: “Si al final del campeonato me falta una treintena de puntos, sabré que ha sido por mi culpa”.
Después, más sosegado ante los periodistas, volvió a admitir su responsabilidad: “Ha sido un error mío. Es muy frustrante. Tengo la sensación de estar en el nivel más alto de toda mi carrera, pero no sirve de nada si cometo este tipo de fallos”.
Tras ese abandono de Leclerc, todo fue cómodo para Verstappen: He podido incrementar mi ventaja progresivamente, teníamos un muy buen ritmo y he podido conservar los neumáticos hasta el final”, se felicitó el holandés.
El vigente campeón mundial logró así su séptima victoria de esta temporada y la 27ª de su carrera, a sus 24 años.
El piloto inglés de 37 años, siete veces campeón del mundo, no ha ganado ninguna carrera en lo que va de temporada. Tampoco pudo conseguirlo en un día en el que disputó su Gran Premio número 300 y en el que firmó su podio número 187.
Hamilton comenzó la carrera a toda velocidad, lo que le permitió adelantar en la salida al mexicano Sergio Pérez (Red Bull). No pudo luchar por la victoria, pero el inglés encadena un cuarto podio consecutivo.
“Estoy muy feliz de alcanzar los 300 GP, pero aún estoy fresco y tengo la impresión de que me queda mucha gasolina en el depósito”, sonrió el británico.
Sergio Pérez terminó cuarto la carrera, siendo adelantado por George Russell en la parte final del Gran Premio.
Especialmente meritoria fue la actuación del español Carlos Sainz Jr, que había comenzado decimonoveno debido a un cambio de motor más allá de la cuota de tres autorizada por temporada. El piloto madrileño protagonizó una espectacular remontada y acabó quinto la carrera, sumando además el punto adicional por la vuelta rápida en carrera.