Foto: Fabrizio Romano

El último día de traspasos en el fútbol europeo estuvo a tono con lo que había sido hasta el momento, tomando en cuenta lo que pasó con Messi y Cristiano Ronaldo. No hubo ‘bombazo’ Mbappé-Madrid, pero sí grandes sorpresas que no se definieron sino hasta el último minuto de inscripciones.

Saúl Ñíguez, el volante que se hizo un nombre en el Atlético de Madrid, pasó a préstamo al Chelsea por cinco millones de euros. Esa movida posibilitó que los Colchoneros recuperen -también en condición de préstamo- a Antoine Griezmann, quien nunca se adaptó del todo al FC Barcelona (el lugar del francés en el conjunto blaugrana será ocupado por el neerlandés Luuk de Jong, proveniente del Sevilla).

También se confirmó que Radamel Falcao García, actualmente trabajando en Santa Cruz con su selección, volverá a La Liga de España: rescindió con el Galatasaray turco para firmar con el Rayo Vallecano. Y un pase menos sonado pero que interesa en Bolivia fue el del ecuatoriano Moisés Caicedo, que pasará a ser compañero del nacional Ramiro Vaca en el Beerschot belga tras su etapa en el Brighton inglés.